Hay veces que nuestra digestión se ve comprometida por algo que comimos o hicimos, ya sea esas palomitas del cine, el viaje largo con la panza llena y los pantalones que aprietan, la mala combinación de alimentos o a veces puede ocurrir así como así, sin causa aparente.
Pues el yoga tiene un impacto positivo en nuestra salud digestiva y para entender esto es importante saber cómo de ligado está el estrés a nuestra digestión. Hay una vía directa del cerebro a los intestinos que se llama el nervio vagus. Si éste se estimula positivamente puede aliviar condiciones psicológicas como la ansiedad y la depresión. Una manera de calmar el nervio vago es respirando lenta y profundamente.
Estudios demuestran que un factor clave en la aparición de problemas digestivos crónicos como el síndrome de colon irritable o colitis entre otros es el estrés.
No es sorprendente imaginar que la práctica de yoga, meditación y respiración ayuda a relajar la conexión cerebro-intestino y su microbiota y mitiga los desórdenes digestivos.
A parte de prácticas que reduzcan el estrés, realizar ciertos movimientos fomenta la buena circulación del aparato digestivo ya que puede activar y/o aflojarlo.
Algunas posturas de yoga comprimen y destensan el estomago y el colon, y este masaje interno puede ayudar a que las cosas avancen y se muevan, ya que a veces la indigestión es precisamente energía atascada, para así decirlo.
Ya sean síntomas como hinchazón y distensión abdominal, gas o estreñimiento, aquí van cinco posturas de yoga que te ayudarán a estimular y a aliviar tu digestión:
Postura del gato vaca
A cuatro patas con tus manos bajo los hombros, inhala y baja el ombligo al mismo tiempo que elevas el coxis y tu mirada hacia arriba (vaca). Después cuello y cabeza hacia abajo y mientras exhalas redondea tus hombros y tira tu ombligo hacia el cielo, recogiendo el coxis para dentro y dejando que tu cabeza quede suspendida (gato).
Con calma y constancia, repítelo entre cinco y diez veces.
Postura de torsión espinal supina
Estirado boca arriba, trae una rodilla hacia tu pecho. Luego crúzala y tráela hacia el lado contrario de tu cuerpo. Mira hacia el lado opuesto de donde está la rodilla y extiende el brazo. La idea es que ninguno de tus hombros ni tu rodilla se separen mucho del suelo. Puedes presionar tu rodilla para profundizar el stretch. Respira profundamente varias veces. Luego repite en el otro lado.
Postura del perro boca abajo
En postura de plancha y con las manos a distancia de hombros, envía tus caderas hacia arriba, doblándote en triángulo. Mantén toda tu suela del pie en el suelo y abre bien los dedos de las manos. Da espacio entre hombros y orejas, deja tu cabeza caer y respira profundamente mientras sientes todo tu cuerpo estirarse. Quédate medio minuto por lo menos respirando tranquilamente.
Postura del hilo y la aguja
A cuatro patas, inhala y en la exhalación desliza uno de tus brazos hacia el lado contrario pasando por debajo de tu panza. Que la palma esté mirando hacia arriba. Deja que el hombro colapse hacia el suelo y que tu mejilla también se pose en el suelo si es posible. Tus caderas no deben inclinarse si no mantenerse como en la postura inicial. Siéntete cómodo y respira profundamente varias veces. Luego repite en el otro lado.
Postura sentada de torsión espinal
Sentado con las piernas flexionadas enfrente de ti, pasa tu pierna derecha entre tobillo y nalga izquierda. La parte externa de tu pierna derecha debería apoyarse en el suelo. Acerca bien el pie a la nalga. Puedes apoyar tu mano izquierda en el suelo al mismo tiempo que cruzas tu codo derecho sobre tu rodilla izquierda para ejercer más presión y estiramiento en la postura. Que tus nalgas no se despeguen del suelo y mantén la columna recta y hacia arriba lo más que puedas. Inhala y cuando exhales trata de profundizar más en la postura. Haz esto varios ciclos y luego cambia de lado.
Así que en cuanto sientas incomodidad en la barriga, desenrolla tu esterilla de yoga, inhala y exhala profundamente y haz estas posturas de yoga para mejorar la digestión.
Recuerda hacerlas con mindfulness, conectando con cómo se siente tu aparato digestivo y enviando las mejores intenciones sanadoras para una barriga feliz.
