La auténtica versión del tan conocido té chai para que lo puedas hacer tú mismo en casa y así poder deleitarte con una humeante y fragante taza de masala chai siempre que quieras.
El antiguo masala chai, que significa literalmente té especiado, está rodeado de cuentos de realeza y medicina herbolaria. Se dice que hace más de 5000 años los emperadores de la India bebían un brebaje a base de especias para mantenerse alerta en la corte. Esta bebida no tenía cafeína y se usaba en Ayurveda. No fue hasta 1835 que con la llegada de los británicos y las plantaciones de té, las hojas de esta planta fueron introducidas.
A pesar de que la producción y exportación de té en India eran altas, el consumo de té era demasiado caro para la persona común de la India.
Sin embargo, con el tiempo los vendedores empezaron a usar las hojas de té sobrantes, que infusionadas con leche, azúcar y especias, darían resultado a un potente brebaje a bajo coste. Esto es la primera aparición del masala chai que todos conocemos hoy.
¿Qué ingredientes se usan para hacer té chai?
El té masala chai es una combinación de especies que agregadas al té negro crean un sabor único. La ventaja de hacer té chai en casa es que puedes decidir qué especies quieres según tus gustos e ir probando, agregando o quitando ingredientes.
Aquí te dejamos con la lista de ingredientes para hacer té chai más comunes:
Clavo de olor: con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, añade notas a tierra.
Cardamomo verde: también antioxidante, añade una dulce fragrancia a tu té chai casero.
Granos de pimienta negra: para un toque picante, además de ser antiinflamatorio y ayudar la digestión y la absorción de nutrientes.
Semillas de hinojo: tiene propiedades digestivas y calmantes. Le dan al té chai un sutil efecto refrescante en la boca.
Canela: es un poderoso ingrediente que regula los niveles de azúcar en la sangre y añade dulzura natural y calidez a tu té chai casero.
Jengibre en polvo: antiinflamatorio, estimula el sistema inmune y mejora la digestión. Esta raíz le dará esa profundidad picante y caliente a tu brebaje.
Nuez moscada: se dice que alivia el dolor, mejora la digestión y la circulación de la sangre. La nuez moscada tiene un aroma con matices dulces y cítricos.
Guindilla roja: si te gusta el té bien picante, puedes añadir unas pocas hojuelas de guindilla en tu mezcla.
¿Cómo hacer té chai en casa?
En cuanto a la receta para hacer chai y las proporciones exactas, preferimos dejarlo en tus manos. Experimenta y prueba hasta encontrar la fórmula que más te fascina.
Simplemente mezcla todos los ingredientes en una procesadora, licuadora o en un mortero hasta conseguir una especie de polvo (no tiene que ser muy fino ya que puedes filtrarlo al servirlo).
Guarda la mezcla en una jarra bien cerrada y usa siempre una cuchara limpia y seca. Como te darás cuenta, es muy conveniente tener la mezcla ya preparada, sin embargo, recomendamos no hacer demasiado ya que es muy posible que con el tiempo la mezcla pierda poder y sabor.
¿Cómo usar la mezcla de té chai casero?
Pon agua en una olla. Cuando esté hirviendo, añade una cucharadita de masala chai. Si lo bebes con leche, es el momento de añadir la cantidad deseada. Deja que hierva tres o cuatro minutos más. Retira del fuego y echa una bolsa de té negro. Tapa la olla y déjalo reposar diez minutos.
Puedes colarlo para evitar partículas de especies en la taza.
Añade a tu gusto y revuelve bien la miel o el azúcar. Puedes hacer esto cuando está en la olla o una vez servido.
Como ves, preparar tu propio té chai en casa es muy fácil. Ahorrarás tiempo y disfrutarás de los sabores auténticos y naturales de cada especie ¡y con todas sus propiedades!
Sin duda, nada mejor que una fresca y aromática taza de té chai hecho por ti mismo, pues es que igual que una buena secuencia de yoga, beber tu té chai casero revitaliza el cuerpo y reconforta tu interior!