El ayuno intermitente es hoy en día uno de los trends más populares en el mundo de la salud.
La gente lo está practicando por tres grandes razones: mejorar su salud, simplificar su estilo de vida y su rutina alimentaria y para perder peso.
Y es que numerosos estudios han demostrado que tiene poderosos efectos en tu cuerpo y en tu cerebro.
¿En qué consiste el ayuno intermitente?
El ayuno intermitente es básicamente un patrón de alimentación que funciona en ciclos de ayuno y de comer.
No se trata de qué comes y qué no, si no más bien de respetar los periodos en los que se ayuna. Es por eso que no se le puede llamar una dieta si no un patrón de alimentación.
Se puede beber líquidos no calóricos, como agua, té y café, pero sin azúcar ni leche.
De hecho, el ayuno es una situación en la que se ha visto el hombre desde hace millones de años de manera natural. Nuestros ancestros cazadores y recolectores pasaban muchos momentos sin comer ya que dependían solamente de lo que había alrededor y como resultado el cuerpo humano evolucionó para poder sobrevivir y funcionar sin comida durante periodos largos de tiempo. En esta línea, es más natural para el cuerpo humano ayunar de vez en cuando a lo opuesto de comer 3 o 4 veces al día cada día del año.
Incluso prácticas antiguas y religiosas practican el ayuno, como es el caso del islam con el ramadan, el cristianismo con la cuaresma, el judaísmo con godalías y el budismo, que acostumbra a comer de forma intermitente muy a menudo.
¿Qué tipos de Ayuno Intermitente existen?
Los métodos más populares hoy en día son:- El método 16/8: se trata de saltarse el desayuno con la idea de restringir tu ventana de comida a 8 horas. Un buen horario es comer entre 1 y 9 pm. También conocido como protocolo Lengains es probablemente el más practicado.
- Comer-parar-comer: consiste en ayunar 24 horas, una o dos veces por semana. Lo más común es cenar, y no comer nada hasta la cena del día siguiente.
- La dieta 5:2: en este método la idea es consumir solamente unas 600 en dos días no consecutivos de la semana.
Con cualquiera de estos métodos, se reduce automáticamente la ingesta de calorías por lo que una pérdida de peso debería ocurrir mientras no se coma en exceso en los períodos en que se puede comer.
¿Cómo afecta el ayuno intermitente en el cuerpo?
Cuando ayunas, ocurren varias cosas en tu cuerpo a nivel celular y molecular. Vamos a verlas:- Crecimiento humano hormonal: los niveles de crecimiento se disparan hasta cinco veces más de lo normal favoreciendo la quema de grasa y la ganancia muscular. También puede incrementar el índice de metabolismo. También favorece la hormona cerebral BDND, lo que podría ayudar al crecimiento de nuevas células nerviosas, protegiendo de Alzheimer’s y mejorando la salud cerebral.
- Insulina: las células se vuelven más receptivas a la insulina, lo que reduce su resistencia y así también reduce el riesgo de ciertos desequilibrios de salud como la diabetes. Esta sensibilidad hace que los niveles de insulina caigan, haciendo que se libere más la hormona noradrenalina, encargada de hacer más accesible la grasa almacenada.
- Reparación celular: cuando tu cuerpo ayuna, las células comienzan un proceso de reparación que incluye la autofagia, donde las células digieren y eliminan las proteínas viejas e inservibles que se acumulan en su núcleo. En este aspecto, el ayuno intermitente reduce el colesterol malo, los triglicéridos, posibles procesos inflamatorios y los niveles de azúcar, lo que ayuda directamente a tener un corazón sano.
- Expresión de genes: se producen cambios en la función de genes relacionados con la longevidad y la protección contra desequilibrios de salud.
Practicar ayuno intermitente es algo que tal vez ya practicas sin darte cuenta, pues hay muchas personas que no sienten hambre al despertar.
El ayuno es una de las muchas estrategias que podrían mejorar tu salud y tu calidad de vida, pero no es algo que funcione para todo el mundo y es que al final no hay una sola manera de hacer las cosas, especialmente cuando se trata de nutrición y salud.
Comer saludable, hacer ejercicio, vivir sin estrés y dormir suficiente son realmente los factores más importantes en los que siempre hay que enfocarse.
Si crees que podría irte bien el ayuno intermitente, la única forma de saberlo es probándolo. Si pasadas unas semanas te sientes bien y se adecúa a tu estilo de vida, practicar el ayuno intermitente podría ser una poderosa herramienta para perder peso y mejorar tu salud.
