Son muchos los
beneficios que aporta la postura de Savasana pero porque la postura de relajación no es la misma para todo el mundo,
YogaYe os propone alternativas* al clásico Savasana. ¡Pruébalas y elige tu favorita! A veces el
Savasana no es la mejor opción, que sea por razones físicas (embarazo, espalda sensible), circunstancial (después de una práctica con muchas extensiones) o emocionales (sensación de estar demasiado expuestos en decúbito supino o acostado boca arriba).
* Esta lista no pretende ser exclusiva. Cualquier postura en la que te sientas relajado puede ser una buena alternativa al Savasana. ¡Descubre nuestras alternativas y comparte!
Con las piernas flexionadas o Posición Constructiva de Descanso
Túmbate en posición supina (boca arriba) con tu tronco sobre una
manta doblada o una
esterilla de yoga o ambos. Flexiona las rodillas, abre los pies al ancho de las caderas y suficientement alejados de los glúteos, busca que exista un poco de aire detrás de las rodillas. Buscamos una postura que requiera la mínima tensión posible. Para salir primero extiende las piernas una a una, observa si tu esplada se ha estirado un poco como resultado de la postura. Esta postura crea una sensación deliciosa de reposo y ayuda a obtener calma mental. Es excelente para aliviar molestias en la espalda baja. Recarga la energía del cuerpo y nos permite continuar siendo eficientes por lo que queda de día. A un nivel estructural, permite el alargamiento y la liberación de los músculos profundos de la columna.
Variación: si hay una tendencia natural a empujar la barbilla hacia el pecho, utiliza una toalla enrollada debajo de las cervicales para ofrecer soporte a la C7, en la base del cuello, cerca de los hombros.
Nuestra bloguera está tumbada sobre la YogaYe Pro Mat. La suya es púrpura y escribió un post para compartir sus impresiones.
Con un bolster de yoga por debajo de las rodillas
Ésta es nuestra favorita - poner un
bolster de yoga por debajo de las rodillas. ¡Pruébala después de tu práctica e incluso a la hora de dormir!
Estas dos variaciones permiten que la zona lumbar se acerque al suelo y reduce la curva de la zona lumbar. Cuando hay dolor en la cabeza, puedes tapar tus ojos con un cojín de semillas.
Con las piernas elevadas y apoyadas en una silla – para personas con sensibilidad lumbar
Esta postura permite que se relajen la zona del abdomen y los flexores de las piernas. Va muy bien después de una clase enfocada en el centro o después de muchas extensiones. Esta variación resulta ideal para aquellas personas que no se sienten cómodas con las piernas estiradas y/o cuando sentimos sensibilidad en la zona lumbar con la postura clásica. En esta posición, la espalda baja puede relajarse mucho mejor y los isquiotibiales no intervienen.
Acostado sobre el costado derecho
Esta postura está recomendada a las mujeres embarazadas con más de 20 semanas de embarazo. De esta forma se reduce la presión sobre la vena cava inferior. También es una buena opción para las personas con dolores de espalda (permite relajar la zona lumbar y alivia el dolor ciático), con reflujo gástrico o problemas respiratorios.
En decúbito prono o postura del cádaver boca abajo
Estamos siempre acostumbrados a tumbarnos boca arriba. Esta postura nos permite cambiar el foco y descansar sobre la parte frontal del cuerpo. Nos pasamos el día hablando y masticando, esta postura es una invitación a soltar todo tracto digestivo y labios, boca, lengua, cuerdas vocales y garganta. Es una excelente forma para enraizarnos hacia la tierra y sentir fuerza de la gravedad. Si sufres de
jetlag, esta postura te hace tomar contacto con el suelo. Se recomienda a las personas que sufren anxiedad o las que se sienten vulnerables emocionalmente al estar tumbadas boca arriba. También, es buena si tienes dificultad en mantener los ojos cerrados en la postura del cádaver.
Variación: puedes colocar una
manta debajo de la barriga, este soporte nos permitirá que el sacro haga una curva descendiente y se relaja la zona lumbar.
Las manos sobre el abdomen
Si tienes dificultad en relajar completamente los hombros hacia el suelo, colocar las manos sobre el vientre puede ser una buena opción. Esta variación permite seguir el ritmo de la respiración lo que favorece la relajación.
Savasana es una de las posturas más importantes y placenteras que hay en el yoga. Estos minutos de cierre son muy importantes para integrar los beneficios de la práctica. Desenrolla tu
esterilla de yoga y no te saltes la relajación final! Si no tienes, tenemos las esterillas de
Jade en oferta. Qué disfrutes tu práctica y tu Savasana. Si el artículo te fue de utilidad y crees que puede ayudar a otras personas, no dudes en compartirlo. ¡Namasté!